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Cómo garantizamos la calidad en nuestros servicios de traducción

Los servicios de traducción profesional se caracterizan por la búsqueda de la calidad. Los traductores profesionales, gracias a su dominio lingüístico, a su especialización técnica, a su compromiso con la formación continua y al dominio de las herramientas informáticas disponibles, garantizan la fidelidad, la coherencia y la adecuación de las traducciones a las necesidades del cliente. A continuación, explicamos qué es lo que tenemos en cuenta para garantizar la prestación de un servicio de traducción de la más alta calidad.

Los criterios de calidad en los servicios de traducción

¿Qué constituye un servicio de traducción de calidad? La calidad va a depender, en gran medida, del contexto del proyecto y de las expectativas, tanto del cliente como del público objetivo de la traducción. No obstante, existen unos principios más o menos universales:

La corrección de la traducción 

Una traducción de calidad debe cumplir los más altos estándares de corrección textual, lo que significa cumplir con las normas ortográficas y gramaticales de la lengua hacia la que se traduce. Por ello, el traductor debe tener un conocimiento nativo o cuasinativo de la lengua hacia la que traduce y un dominio experto de las herramientas lingüísticas

La precisión de la traducción

Una traducción de calidad debe reflejar de manera precisa y completa el mensaje original. Para ello, se debe respetar el contenido, la intencionalidad, el estilo, el registro y la terminología. Por ello, el traductor debe tener un conocimiento profundo de la temática sobre la que traduce y de las herramientas terminológicas y documentales existentes.

La adecuación de la traducción 

Una traducción de calidad debe adaptarse a las necesidades del cliente, así como al público que va a leer la traducción, a su conocimiento de la temática sobre la que versa el texto y a su contexto. Por ello, el traductor debe ser versátil y contar con las herramientas necesarias para adaptarse a cada proyecto.

La claridad de la traducción

Una traducción de calidad debe leerse como si hubiera sido escrita directamente en la lengua de la traducción y ser coherente. Para ello, el traductor debe contar con recursos lingüísticos que permitan que el texto fluya y se lea sin ningún problema, sin incongruencias, lagunas o problemas de redacción.

Por último, si hay algo que caracteriza a los servicios de traducción de calidad es la atención al cliente. El proveedor de servicios de traducción debe responder de manera rápida a las solicitudes del cliente, entregar la traducción en tiempo y forma, garantizar una comunicación ágil y ofrecer un servicio integral y adaptado.

Las fases de un proceso de traducción de calidad

Para cumplir con estos principios de calidad, es preciso contar con un proceso de traducción claro y estructurado, que bien podría estar compuesto de las siguientes fases:

Análisis del proyecto de traducción 

Desde el primer contacto con el cliente, se empieza a analizar el proyecto en toda su complejidad. Se identifican la temática y la finalidad del texto, las expectativas del cliente y de la audiencia, los plazos y las necesidades del servicio.

Asignación del equipo de traducción

Se identifican a los profesionales de la traducción idóneos para el proyecto, que deben contar con disponibilidad para asumir el encargo, dominio de las lenguas de trabajo y conocimiento de la temática y el campo del texto.

Documentación previa a la traducción

Se identifican las principales fuentes de documentación y consulta para el proyecto, de índole temática, lingüística y terminológica. Esto permite al equipo documentarse tanto antes de iniciar el proyecto como durante el proyecto en sí.

Traducción del texto a traducir

El equipo de traductores asignado debe dominar no solo los idiomas de trabajo, sino también el sector en el que se enmarca el texto. Para ello, cuando es necesario, se realizan pruebas de traducción que permiten certificar la adecuación de la persona para el proyecto.

Revisión del texto a traducir

El equipo de revisores debe contar con una dilatada y contrastada experiencia traduciendo y revisando traducciones. Su función es cotejar la traducción con el original, para comprobar que no se haya quedado nada en el tintero, así como pulir el estilo y el formato.

Control de calidad del proceso de traducción

Para supervisar el proceso y la calidad en todo momento, se asigna a un gestor de proyectos encargado de mediar entre las distintas personas implicadas, de responder a las necesidades del cliente y de incorporar cualquier cambio, petición, comentario o corrección. También se buscará la mejora continua y el perfeccionamiento del proceso.

Para cumplir con éxito todas estas fases, el equipo de traductores profesionales asignados al proyecto debe también contar con un dominio absoluto de las herramientas tecnológicas necesarias para garantizar la coherencia terminológica y estilística, una comunicación fluida y una buena capacidad de adaptación y respuesta.

Intuitas como sinónimo de un servicio de traducción de calidad

En Intuitas, tenemos el firme compromiso de garantizar la excelencia en todos nuestros servicios de traducción, con el fin de ofrecer traducciones de calidad que satisfagan las necesidades de nuestros clientes. Para ello, utilizamos un enfoque integral que pasa por el análisis de las necesidades del cliente, la selección cuidadosa del equipo de traductores especializados y cualificados y la puesta en marcha de procesos de control de calidad, retroalimentación y perfeccionamiento del servicio. Además, gracias al uso de herramientas de traducción asistida por ordenador y otras herramientas tecnológicas, podemos automatizar los procesos más mecánicos para centrar las energías del equipo en la faceta más humana del proyecto. Si necesita un servicio de traducción de calidad, póngase en contacto con nosotras.